Enredados en la Red

 

No hace mucho hablamos de unos de los juegos de mesa con el que más tardes de sábado o domingo he disfrutado con amigos. Si Los Colonos de Catán puede considerarse como el mejor exponente para disfrutar de los llamados Eurogames, el juego que ahora tratamos es el ejemplo perfecto para iniciarse en el citado entretenimiento.

 

Carcassone fue diseñado por Klaus-Jürgen Wrede en el año 2000, uno más tarde es nombrado juego del año (Spiel des Jahres). Ha sido publicado en nuestro país por la editorial Devir. Tomando como punto de inspiración la ciudad amurallada francesa del mismo nombre, la dinámica consiste en crear un mapa en el que los jugadores deben hacerse con el control de determinados elementos: castillos, granjas, caminos y monasterios.

 

En cada partida, el juego es totalmente diferente, debido a que los jugadores, de forma aleatoria y sin saber qué ficha, van sacándolas de la pila y colocándolas según sus intereses. Es necesario que entre ellas exista coherencia (por ejemplo, si el borde de una termina en pieza de castillo, este lateral no podrá ir junto a uno de camino o campos, sino adosarse a otro de castillo). Cada jugador se hace con el control de cada elemento colocando una ficha sobre la misma del color que le corresponda. El mando de cada elemento lo adquirirá quien más piezas de su color tenga sobre ellos. Una vez terminada la construcción, se recuperarán las fichas y se sumarán los puntos correspondientes.

 

Como siempre ocurre, parece complicado, pero, una vez iniciado, es todo lo contrario. Perfectamente, cada partida pude durar no más de media hora, lo que hace que sea bastante rejugable en una misma tarde.

 

A lo largo de los años, han aparecido numerosas expansiones. El sistema de juego así lo permite, lo que hace que haya algunas que o amplían las posibilidades del sistema o añaden nuevas funcionalidades e ideas. Las expansiones publicadas en España por Devir son: Posadas y Catedrales; Constructores y Comerciantes; La Princesa y el Dragón; La Abadia y el Alcalde, y La Torre. De ellas, sólo he podido disfrutar de la primera y tercera de ellas. Particularmente, creo que Posadas y Catedrales mejoran bastante el juego, pero no ocurre así con La Princesa y el Dragón, ya que desvirtúan en demasía la esencia del juego.

 

Lo dicho. Una opción bastante buena y divertida que, por poco menos de 20 € se puede disfrutar con amigos o en familia.

Publicado por Carlitos